Civilizaciones:

¿Alianza de o choque de?

Creo que puede ser interesante ir abordando en este blog algunos de los temas candentes de nuestra sociedad en vez de perdernos en disputas inútiles sobre aspectos que o bien no tienen entidad suficiente por ser ficticia su aparente importancia, o bien, aún teniéndola, nada podemos resolver los ciudadanos de a pie. Entre los temas sin entidad suficiente podríamos poner como ejemplo las polémicas sobre banderas y otros símbolos, o sobre la inminente ruptura de España, ruptura que está muy lejos de ser peligro real ni una preocupación de los ciudadanos. Entre los segundos (serios pero que se salen de nuestras posibilidades de actuación) se encuentra la gravísima situación por la que atraviesa el tribunal Constitucional que es una pieza clave de nuestra democracia. En cualquier caso algún día podríamos también debatir sobre estos asuntos y otros como el funcionamiento de los partidos políticos, la corrupción demasiado frecuente en el seno de los mismos, los sueldos de los políticos etc.

El tema que da título a esta entrada viene sugerido por un interesantísimo Congreso de Historia Medieval que bajo el sugestivo título “CRISTIANOS Y MUSULMANES EN LA PENÍNSULA IBÉRICA: la guerra, la frontera y la convivencia”se acaba de celebrar en León por iniciativa de la Fundación “Sánchez Albornoz” y a cuyas sesiones he tenido la suerte de poder asistir prácticamente en su integridad. Y éstas me han dado pie para introducir un debate que puede ser incesante y cuyos datos de partida pueden ser los siguientes:

1) No se ha tratado de política sino que ha sido un simposio eminentemente científico. Sin embargo el estudio de nuestra historia de los siglos XI y siguientes da pie para hacer una serie de consideraciones y sacar unas conclusiones de gran interés de cara a la próxima campaña electoral ya que va siendo hora de que los planteamientos políticos se basen en fundamentos serios y no en afirmaciones faltas de base sólida cuando no meramente electoralistas y demagógicas.

2) Los siglos estudiados en este Congreso están llenos de enfrentamientos bélicos como por otra parte ha sucedido en casi todas las etapas de la vida de la humanidad. Pues bien, se puede afirmar que la totalidad de esas guerras han tenido un trasfondo religioso, es decir que los hombres se han matado unos a otros en nombre cada uno de su dios y de su religión, dioses y religiones que suelen tener teóricamente como bandera y norma suprema la búsqueda de la paz y, el amor y la solidaridad.

3) Aunque el enfrentamiento entre el cristianismo y el islam fue una constante durante toda la Edad Media, hubo épocas y momentos de mayor acercamiento y diálogo pero siempre fue más fácil el entendimiento en el terreno cultural y científico que en el religioso. Se puede decir que la religión fue una vez motivo de discordia más que de unión como ya se ha dicho en el punto anterior.

4) Entre otros temas de gran interés que se expusieron a lo largo de los cuatro días de duración del congreso, destacó a mi juicio la exposición que hizo el catedrático de Historia Medieval de la Universidad de Granada profesor Emilio Molina sobre una figura poco conocida que defendió durante la primera mitad del siglo XV unas ideas poco usuales en aquella época y que no han perdido actualidad ni vigencia cinco siglos más tarde. Este personaje, llamado Juan Alfonso González y conocido como Juan de Segovia por referencia a su ciudad natal, fue le máximo exponente de una corriente de opinión que ya se había manifestado si bien tímidamente a lo largo de los siglos precedentes y que defendía que la vía de las armas no era la única ni la mejor para orientar las relaciones entre cristianos y musulmanes, sino que era necesario un acercamiento mutuo buscando todos los aspectos, que eran muchos, en los que era posible entenderse, y dejando los más conflictivos para más adelante cuando se diesen las circunstancias que lo hiciesen posibles. Hizo algunas alusiones el ponente a las propuestas que en la actualidad se han hecho en ese sentido y que encontrarían una sólida base histórica en la obra de escritores medievales entre los que destaca el mencionado Juan de Segovia cuya obra ha sido objeto de un reciente estudio publicado por un franciscano gallego, insigne arabista y profesor también de la Universidad granadina hasta su muerte ocurrida hace unas dos décadas. Esta obra, cuyo autor es Darío Cabanelas y su título “Juan de Segovia y el problema islámico” va a estar a nuestra disposición dentro de un par de semanas y de ella haremos un breve resumen en este blog lo cual no impide que ya comencemos ahora a debatir un tema que, como he dicho al principio, puede ser interesante de cara a la próxima campaña dados los disparates que sobre la propuesta de José Luis Rodríguez Zapatero sobre la Alianza de Civilizaciones han hecho algunos destacados miembros de la oposición.

Alberto Pérez Ruiz